Para Aristóteles la materia es de lo que está hecha una cosa y la forma es lo que hace que esta cosa sea lo que es. Por ejemplo, tenemos la idea de la forma de un edificio sin imaginarnos alguno en particular, solo lo hacemos por los atributos que le damos.
En los últimos años el auge de la construcción nos esta dejando grandes estructuras que nos acompañarán muy probablemente por el resto de nuestras vidas modificando en distintos niveles la manera en la que percibimos la ciudad y nos sentimos en ella.
La idea de este trabajo es que a partir de la abstracción de la forma como tal de un edificio a partes de su composición arquitectónica, desde la perspectiva de un transeúnte, invitar al observador a la reflexión sobre el efecto de estas estructuras a través del tiempo en la psique de nuestra identidad social e individual.







